Comience sus aventuras de exploración de la naturaleza en la ciudad y visite el jardín botánico de la Universidad de Szeged. Luego, atraviese el río por el Puente Central, o admire los árboles gigantes del Parque de Isabel. Seguidamente, visite el “Lapos” (Llano), el lugar de descanso popular de Szeged a orillas del río Tisza, donde podrá tomar un poco de sol.
Aventuras acuáticas
Si le apetece disfrutar de las bellezas de la naturaleza también fuera de la ciudad, tome una canoa y recorra algún tramo del Tisza entre Csongrád y Csanád. Incluso los principiantes pueden probar el piragüismo, porque el agua del río que fluye con majestuosa lentitud no es peligrosa en absoluto, y el paisaje es fabuloso. Pero también vale la pena descubrir el lago Blanco y sus alrededores, puesto que este es el lago salino más grande del país que, debido a su rica avifauna y vegetación, es un área especialmente protegida. También visite el Centro de Visitantes del valle del Tisza, donde podrá conocer la vida silvestre local y, finalmente, caminar por el hermoso sendero educativo «Gaviota».