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Alternativas del vino

LA RELACIÓN DE LOS HÚNGAROS CON LOS VINOS NACIONALES ES TRADICIONALMENTE ESPECIAL. MUCHOS ESCRITORES Y POETAS HAN SIDO INSPIRADOS POR EL VINO, QUE APARECE ENSALZADO EN NUMEROSAS OBRAS LITERARIAS.

 El fröccs (vino con soda) es el acompañante ligero de los encuentros entrañables entre amigos. El burbujeante refresco hecho de alguna mezcla de vino y soda se considera casi una bebida nacional en Hungría. En los festivales, conciertos y clubes, hoy día una de las bebidas favoritas es el fröccs de vino rosé, y existen muchas variedades de esta mezcla. No obstante, el fröccs se prepara tradicionalmente con vino blanco seco. El fröccs tradicional se prepara con dos decilitros de vino y un decilitro de soda, el llamado fröccs grande, pero además, en Hungría se sirven fröccs en numerosas proporciones y con diversos nombres, las variedades sólo se limitan por la imaginación. Así es, por ejemplo, el «paso largo», hecho con un decilitro de vino y dos decilitros de soda, o el «viceconserje», con dos decilitros de vino y tres decilitros de soda. 

El fröccs, prácticamente, está disponible en cualquier unidad de restauración en todo el país. En algunos bares de vino, se puede paladear especialidades como el fröccs de rosé con jarabe de lavanda o el fröccs blanco con jarabe de saúco. Sin embargo, la popularidad de los bares de vino no se debe primordialmente a estas bebidas, sino a los vinos de calidad asequibles en una muy amplia variedad. Con el aumento del interés por los vinos de calidad, en Budapest también se ha desarrollado la cultura de los bares de vino. En estos lugares de calidad, los visitantes pueden realizar viajes de degustación, pues se caracterizan por servir también vinos poco conocidos de las regiones vinícolas más pequeñas de Hungría, incluso con deliciosas tapas.

 Al igual que sienta bien un refrescante fröccs frío en verano, paseando entre los pabellones de madera de la feria de adviento bajo los copos de nieve en invierno, se agradece una copa de vino caliente condimentado. El vino caliente puede prepararse de vino tinto, blanco o rosé; con su aroma de canela, clavo y miel es un protagonista imprescindible de las temporadas de invierno. Con la llegada del clima fresco, además de las ferias navideñas, el vino caliente está incluido en la oferta de casi todos los bares. 

‎¡MUÉVETE EN TU ENTORNO COMO UN HÚNGARO!