En 1957, en Bük, causó gran asombro cuando, en lugar de petróleo, brotó agua medicinal del suelo. Al principio, el "baño de zanja" era popular entre los lugareños, pero pronto abrió oficialmente el Balneario de Bük. Desde entonces, el pequeño pueblo se ha convertido en una popular ciudad balneario que también atrae a muchos turistas extranjeros. En la actualidad, las Termas & Spa Bükfürdő se han ampliado hasta convertirse en un enorme complejo, con agua termal procedente de cuatro pozos certificada como agua medicinal. Su composición única, su contenido en bicarbonato alcalino, calcio, magnesio y flúor, así como su contenido en minerales, son muy elevados según los estándares internacionales. El agua especial amarillenta y densa tiene una amplia gama de usos: antiinflamatoria y con efectos benéficos en la circulación sanguínea; se utiliza como remedio de trastornos musculoesqueléticos, ginecológicos-urológicos y digestivos. Sus efectos beneficiosos se pueden disfrutar en las piscinas termales interiores y exteriores, pero también hay muchas otras opciones de baño en la nueva sección de experiencias interior de Bükfürdő, con corredores de deriva, jacuzzi y toboganes con efectos de luz.