Experiencias culinarias a orillas del lago Balaton

Mientras que hace unas décadas la mayoría de los visitantes identificaban al lago Balaton con la clásica comida de playa y los platos de los mesones húngaros, en los últimos años se ha experimentado una auténtica revolución gastronómica a orillas del lago. Cada vez son más los restaurantes y pastelerías que ofrecen una experiencia gastronómica moderna y de calidad, donde los chefs con espíritu experimental apuestan por adaptar y replantear las recetas tradicionales. En el pasado, la cuenca del Káli era el destino favorito de los sibaritas que visitaban el lago Balaton, pero hoy día hay lugares a largo de toda la orilla del lago que complacen los paladares incluso de los comensales más exigentes. Los auténticos restauradores del Balaton ponen el corazón y el alma en su trabajo, utilizan ingredientes locales y preparan con esmero platos únicos. 

Si nos encontramos en una localidad a orillas del agua, no podemos olvidarnos de los platos de pescado, que se ofrecen en una variedad especialmente tentadora en los alrededores del lago Balaton. Mientras se está en la playa del lago o de excursión, es una opción habitual hacer una parada en un puesto de pescado frito a orillas del lago Balaton y, en la cena, terminar el día con una sustanciosa sopa de pescado tradicional del Balaton. Cada localidad tiene su propia receta, ¡un año sería demasiado corto para probarlas todas! La sabrosa sopa "petyek" de Fonyód, elaborada a base de lecsó (guiso de cebolla, tomate y paprika), por ejemplo, no la pasan por un colador como en otros lugares, sino se cuece lentamente; de ahí el nombre, "petyek", que hace alusión al sonido burbujeante de la sopa mientras hierve a fuego lento. En Keszthely, en cambio, la elaboran según la receta clásica, pasándola por un colador, mientras que en Vonyarcvashegy la sopa de pescado se prepara al estilo chucrut, con col fermentada y eneldo.  ¡Y sólo vamos por el primer plato! Existen al menos otras tantas variedades de pescado frito y rebozado capturado en la región. Pero también merece la pena adentrarse en el reino de las recetas tradicionales húngaras. Uno de los platos húngaros favoritos, la sopa de alubias al estilo Jókai, procede de Balatonfüred. Los taberneros y familiares del famoso escritor húngaro solían prepararle aquí su sopa de alubias favorita que, desde entonces, lleva su nombre. También merece la pena degustar el gulash y el paprikash de Bakony al estilo "forajido".

No hay vacaciones de playa en el lago Balaton que se precien sin los clásicos aperitivos playeros. El lángos es una auténtica especialidad húngara: se puede comer con aceite al ajo, crema agria, queso, cebolla, aderezo de carne o incluso mermelada. El maíz cocido es otro manjar que está en los platos de los playeros casi todos los días de verano. Y para los más golosos, además de las crepes y gofres, también hay helados que se encuentran de todos los sabores y ayudan a refrescarnos.

Además del azul de las aguas del lago Balaton, hay otro color que caracteriza este paisaje: el color púrpura de la lavanda. La lavanda de Tihany es la más famosa, pero también en Dörgicse, Kőröshegy, Monoszló y muchos otros pueblos aledaños al lago Balaton se puede encontrar esta planta de fragancia característica y efecto antiestrés, así como los manjares que se elaboran con ella. Porque la lavanda no se utiliza únicamente como ingrediente para perfumes, sino también como base de alimentos y bebidas: puede aromatizar la miel, el chocolate, la limonada, las galletas, las magdalenas, pero incluso hay cerveza artesanal de lavanda, vino y hasta ginebra aromatizados con lavanda. Una auténtica especialidad es el vino de miel, elaborado a partir de la fermentación de la miel de flores, que puede ser el broche de oro de un día de descanso activo.

¡Pero no sólo merece la pena degustar aquí los vinos aromatizados con lavanda! Hungría es una auténtica potencia vinícola en Europa, y la región vinícola del Balaton comprende seis zonas vinícolas diferentes: las zonas vinícolas de Badacsony, Balatonboglár, Balaton-felvidék, Balatonfüred-Csopak, Nagy-Somló y Zala, todas con caracteres diferentes, pero de igual exquisitez. Llenemos nuestras copas y disfrutemos a sorbos del Badacsonyi kéknyelű, elaborado con cepas húngaras ancestrales, del juhfark de Somló, también conocido como el vino de las noches de boda, del Olaszrizling de Csopak, o de los vinos blancos ligeros y los espumosos de la zona vinícola de Balatonboglár.