Región de Sopron Hungría para las familias - 5 días

En la Edad Media, Sopron fue una de las siete ciudades reales libres más importantes del país, una ciudad de investidura de reyes y fronteriza que, por su posición geográfica, siempre ha desempeñado un papel importante en la historia como mediadora cultural. Las antiguas rutas comerciales romanas también pasaban por la ciudad, los edificios ‒que albergan varios museos‒, casas y callejones estrechos del centro de la ciudad son testigos de su rica historia. La Casa Fabricius, el Museo de la Farmacia, el Foro de la antigua Scarbantia, las Sinagogas Vieja y Nueva, la Casa Eggenberg, la Casa Lábas y la Casa César se pueden visitar en el marco de un paseo por el centro de la ciudad.

En la plaza principal, la casa Storno y la Iglesia de la Cabra guardan sorpresas para los visitantes de todas las edades.

La Casa Storno es uno de los edificios más hermosos de la ciudad, un palacete barroco de esquina que muestra la historia de Sopron de los siglos XVII y XX. El epónimo Ferenc Storno llegó a Sopron por equivocarse de camino, y comenzó a trabajar como deshollinador; pronto descubrió en los desvanes de Sopron y sus alrededores las obras caídas en el olvido. Un dato interesante: este edificio albergó al rey Matías durante el invierno de 1482-1483.

El pasado de la Iglesia de la Cabra se remonta a tiempos ancestrales; se menciona por primera vez en un documento de 1280. Sobre su entrada, se observa un escudo de armas en el que figura una cabra que hace referencia al benefactor de la iglesia. Y ¿quién era este benefactor, por qué se llama así la iglesia y qué eventos históricos y coronaciones tuvieron lugar en la iglesia? Todos estos detalles se pueden averiguar al conocer su historia.

Para terminar, den un paseo por las calles que rodean la Plaza Mayor. La calle de San Jorge, la calle Nueva, la calle del Monasterio y la calle de la Iglesia esconden innumerables edificios y monumentos de destacada belleza.

Al llegar al mirador Károly, ya entenderá por qué a los lugareños les gusta subir hasta allí. Un paseo por los bosques de los montes Lővér disfrutando del aire fresco en compañía de ciclámenes, ardillas y, si tienen suerte, corzos. Al pie del mirador, le espera un museo y, desde lo alto del mirador otra vez disfrutará de una vista maravillosa de Sopron, incluyendo el lago Fertő, la vecina Austria y Schneeberg.

Pasen un rato en el Museo de Caza Kőhalmy, donde podrán conocer ‒para deleite de los niños, de forma interactiva‒ los valores naturales, la fauna y la flora del parque forestal. La exposición se ve enriquecida con trofeos disecados, así como con el legado, mobiliario personal, antiguo escritorio, trofeos, notas y libros del ingeniero forestal, biólogo de la vida silvestre y epónimo del museo.

El sendero educativo Ciklámen es uno de los caminos más famosos de las montañas de Sopron. Perderse es imposible, tan solo tiene que seguir las ciclámenes pintadas en los troncos de los árboles. El sendero le guiará por los lugares de interés más hermosos del bosque de Sopron: el valle del arroyo de las Cabras, el prado de Fáber, el lago Salamandra, las siete Hayas, el foso de Tacsi y el mirador Várhely.

La dinastía de pasteleros Harrer de origen austriaco lleva ya cuatro generaciones deleitando a sus clientes y, desde hace una década, se dedican también a la elaboración del chocolate.

Ellos mismos tuestan los granos de cacao procedentes de los mejores lugares de producción, todos los productos se elaboran a mano, utilizando exclusivamente ingredientes naturales y, luego, aromatizan las delicias con semillas, frutos secos y especias.

Gracias a la constante experimentación, su gama de chocolatinas es única, y sus productos son premiados en prestigiosos concursos internacionales. Prueben sus chocolates amargos y con leche, los bombones, los ganaches, el chocolate caliente y, en los calurosos días de verano, por supuesto, los helados.

Para la degustación de chocolate, es conveniente hacer la reserva con antelación.

Comience el recorrido en Kócsagvár (Castillo de las Garcetas), que recibió su nombre por uno de los representantes de la avifauna local, la garceta. En Öntésmajor, un pequeño pueblo situado a 7 km de la ciudad de Kapuvár, podrán visitar la exposición sobre la fauna de la región de Hanság y la conservación de los restos del antiguo pantano y ciénaga. En la finca Lászlómajor, ubicada en la vecindad del pueblo de Sarród, en el antiguo caserío de los Esterházy, podrán visitar una granja que muestra la vida aldeana.

Si le gusta la recreación activa, le encantará hacer piragüismo. Durante la excursión de 6 km, por los canales abiertos en los densos cañaverales del lago Fertő llegarán a un mundo casi intacto que les brindará, sin duda, una experiencia inolvidable.

Y para explorar los canales entre los cañaverales y la fauna acuática en aguas abiertas del lago Fertő, suelten las amarras en uno de los barcos solares habilitados con este fin. Debido al casi imperceptible sonido del motor, podrán observar las aves acuáticas y los mamíferos que suelen esconderse o toleran menos la presencia humana. El barco es muy estable y cómodo, así que no duden en subir a bordo también con niños.

El último día, diríjanse a Bükfürdő para visitar las termas.

Las aguas medicinales brotan a la superficie desde una profundidad de 1282 m a través de 4 pozos y sirven para tratar o prevenir los trastornos musculoesqueléticos. Pero no solo por las aguas curativas vale la pena visitar el lugar. A los amantes de los deportes, la recreación activa y la natación les esperan una superficie total de 1400 m2 de piscinas exteriores, interiores de experiencias y de inmersión, así como toboganes, una piscina de Kneipp, un jacuzzi, varias saunas y diversos tipos de masaje.

El conjunto de toboganes al aire libre comprende 4 pistas y ofrece una experiencia inolvidable para pequeños y mayores. Por los toboganes familiares los padres incluso podrán deslizarse juntos con sus críos. Después de la piscina familiar Acapulco con olas y bahía de salto, podrán relajarse en el parque de hamacas situado al lado. Y para los más pequeños, se ofrecen parques acuáticos provistos con elementos especiales, columpios, toboganes y elementos de trepa.

En el área del spa, podrán relajarse a la sombra de los árboles sin ser molestados, jugar, deslizarse por los toboganes, bañarse en las piscinas y hacer deporte con los niños.