Caminando desde la Plaza Mayor, llegará la Plaza Jurisics, la antigua plaza del mercado de la ciudad, llena de monumentos. Aquí podrá ver la iglesia gótica y barroca de Santiago, la iglesia de San Emerico construida para los protestantes y posteriormente entregada a los católicos, la Fuente de la ciudad construida en 1766, la casa Sgrafittós, ricamente decorada, símbolo del culto a María durante la Contrarreforma, la estatua "retorcida" de María y el Museo de la Botica del Unicornio de Oro, de fama nacional. Esta última es una verdadera singularidad: el edificio de la Botica del Unicornio de Oro, inaugurado en 1743, fue reconstruido en el siglo XVIII y presenta tanto la farmacia monacal como la civil de los siglos XVII a XIX, y el mobiliario original de 1735-1744 de la antigua farmacia jesuita de Kőszeg es un verdadero tesoro. (Curiosamente, Kőszeg cuenta con otro museo de farmacia, el Museo de la Botica Fekete Szerecseny «Sarraceno Negro»). El ayuntamiento más antiguo de Hungría, de rayas amarillas y rojas, se encuentra en la plaza Jurisics, donde se celebran continuamente concejos, reuniones y juicios desde el siglo XIV. Pero es la Torre de los Héroes, a pesar de su relativa novedad, la que define el contorno de la plaza: Fue reconstruida en 1932 en el lugar de su predecesora demolida a finales del siglo XIX. Actualmente, sirve como sala de exposiciones Municipal y, en ocasiones festivas, suena música de torre desde su balcón, mientras que abajo podemos pasar por la puerta que lleva al Castillo de Jurisics.